Pongo fin a éste ciclo empezado en el pasado mes de Septiembre, tal como relataba en el capítulo 29. No hice progresos durante él: muchas alternancias entre rigidez y alivio en mis dietas alimentares en la persecución a mi objetivo de llegar al Estado de Inedia. Como previa efectuar algunas salidas de aquí, con viajes cortos, tampoco me empeñé mucho en seguir regímenes a rajatabla que no sabía como daría continuidad fuera de casa… Así llegué al fin de Febrero sin novedades para contar: Me mantengo con mi peso “estilizado” de 50 k para 1,64 de estatura, recorro caminos y cerros de los alrededores como actividad principal diaria (2 a 3 horas de caminata). Como unas veces más y otras menos, pero siempre poco para los “padrones normales” de actividad que mantengo.
Ahora llevo dos días solo con frutas y tomate. Pretendo continuar así por un buen tiempo en éste próximo ciclo (11º). Voy a disminuir también mi nivel de actividad, para ver si así evito problemas que tuve en los otros ciclos y que pueden ser por aquél sabido “desequilibrio energético” entre gasto / acumulación…
Brasil 5 / III / 2012
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